La fábrica, punta de lanza de un clúster automotriz verde para Ramos Arizpe; ahí se produjeron más de 364 mil vehículos ligeros en 2021, desataca el gobernador Miguel Ángel Riquelme.
Con una inversión de 100 millones de dólares y la estimación de la generación de 400 nuevos empleos, arrancó ayer la construcción de la planta de la coreana LG-Magna e-Powertrain, que fabricará componentes para vehículos eléctricos, lo que constituye la primer empresa que formará parte de la cadena de proveeduría para la armadora General Motors (GM) en Coahuila.
La planta, proyecto en conjunto entre las empresas LG y Magna, estará en el parque industrial Santa María, donde producirán inversores, motores y cargadores integrados para GM, que recientemente modificó sus líneas de ensamble para cumplir con la meta global de producir un millón de autos eléctricos en 2025.
El presidente de la fabricante de componentes de vehículos de LG, Eun Seok-huyn, afirmó que la planta de Ramos Arizpe representa uno de los puntos más importantesde su estrategia a largo plazo para consolidarse como socio de innovación automotriz.
Mientras el director ejecutivo de LG Magna e-Powertrain, Cheong Won-suk, dijo que la nueva planta demuestra el crecimiento continuo desde el arranque de sus operaciones en julio del 2021, además de que “nos ayudará a expandir nuestra presencia en el mercado mundial de vehículos eléctricos de rápido crecimiento”, añadió.
El gobernador Riquelme recalcó que en 2021, en Coahuila se produjeron más de 364 mil vehículos ligeros, y, se registraron más de 8 mil millones de dólares obtenidos por la importación derivadas de fabricación de equipos de transporte.
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